Marcos Siebert: “Fue un año deportivamente increíble”

El piloto marplatense que ganó el Lobo de Mar de Oro en la ceremonia de anoche habló en Marca Deportiva Radio (FM 99.9) analizando su gran año de competencia que terminó coronándolo como campeón de las European Le Mans Series. Además habló sobre el premio recibido: “es de los que más disfruto porque es en mi ciudad”.

Marcos Siebert recibiendo su distinción (Foto: Christian Martínez)

Por Rodrigo Divito (@rodrigodivito)

Este lunes por la noche, Marcos Siebert vivió una noche distinta. Tenía apenas unas horas de arribado a Mar del Plata y se hizo presente en el Teatro Colón para recibir una mención especial por su gran año deportivo, pero además se terminó llevando el premio más importante de la velada: el Lobo de Mar de Oro.

Luego habló a través de Marca Deportiva Radio (FM 99.9) recordando que “fue una noche especial y muy linda en lo personal. La verdad que no esperaba el premio, me ponía como favorito mi año deportivo pero uno nunca se lo espera. Hoy sacaba números, en 2006 fue mi primera terna cuando corrí en karting. Son los premios que más disfruto”, destacó.

Su 2023 fue verdaderamente inolvidable porque compitió en tres campeonatos distintos e incluso con autos muy diferentes. Por un lado el GT3 y por el otro primero las Asian y luego las European Le Mans Series donde se terminaría coronando campeón con un auto del Cool Racing: fue un año deportivamente increíble. Especialmente cuando ves los resultados y los números donde corrí. Comencé temprano en las Asian Le Mans Series donde no tuvimos suerte en las carreras pero éramos serios candidatos. Hicimos algunos podios. Después el GT3 en el Mercedes y el Campeonato Europeo de Resistencia que es uno de los campeonatos más importantes del mundo en prototipo. Era el foco más importante y lo terminé ganando con 6 carreras, donde hicimos 5 podios y tres victorias con récord histórico de puntos. Si me lo decías hace un año era difícil de creer”.

Tenía la oportunidad de ser campeón también del GT3, pero surgió un problema que lo hizo elegir por un sólo torneo en el tramo final: “las definiciones de los dos campeonatos coincidieron y tuve que eligir por el más importante. Costaba mucho cambiar de un auto a otro porque son coches muy distintos. Creo que es una de las cosas que trabajé mucho al principio de mi carrera, al estar limitado con el presupuesto no podia probar mucho y cada vez que salía a pista tenía que adaptarme rápido”.

Además de ser campeón, tuvo otras experiencias destacables como compartir el equipo con José María “Pechito” López que corría en un auto del mismo equipo pero en la categoría LPM2: en lo personal fue algo muy lindo estar con Pechito López para hablar de condiciones de pista, secretos, siendo tan experimentado en estas competencias; lo más íntimo también como salir a comer a la noche y compartir los fines de semanas con él”.

Estar en ese lugar de privilegio le llevó muchos años incluida una carrera que venía ascendente hacia la Fórmula 1 que tuvo que dejar de lado luego de la pandemia para empezar a dedicarse a este tipo de autos: “a veces uno enfría, ve donde está. Me pasa cuando estoy sentado arriba del auto, pienso “que locura es esto”. A la vez uno lo normaliza, porque es algo natural y a la vez excepcional. En pandemia tuve un año y medio o dos muy duros, creo que nunca rendirse fue el secreto. A veces hay que seguir, aunque no es fácil”.

Ahora como campeón de la ELMS seguramente se empezarán a abrir otras puertas para su futuro: “me facilitará un poco a futuro, no es fácil pero cuando uno no tiene presupuesto hay que ganarse el lugar a base de resultados. Eso me motiva a dar el 100%. No tengo definido lo que haré pero mi plan es seguir en el mismo campeonato porque es increíble y por otro lado, me gustaría seguir la opción de seguir con el Mercedes en el GT3. Voy a empujar por los dos caminos”, adelantó sobre sus intenciones.

Paralelamente como campeón de la F4 Italiana y con una amplia experiencia en los autos de fórmula, se dedica a brindar servicio de Coach a los jóvenes pilotos en su antigua escudería, el Motorsports: “es un poco estar vinculado con ellos, mi curriculum me abre las puertas a eso para los pilotos que están comenzando; transmitirle mi experiencia. Si bien los equipos tienen sus ingenieros, escuchar a un piloto mano a mano sobre lo que piensa y sienta es distinto. Conmigo lo hacía Luciano Crespi”.

Incluso en su larga experiencia, tuvo posibilidad de compartir convivencia con Franco Colapinto, piloto argentino que se encuentra muy cerca de poder dar el paso hacia la Fórmula 1, pero todavía está en proceso de conseguirlo: “con Franquito tengo una relación muy buena, vivimos juntos en Valencia, hicimos muy buena relación y compartimos en Fórmula 3 los fines de semana. Le deseo lo mejor y tiene mucho potencial y apoyo, tenemos que cruzar los dedos para que siga así. A nivel país tiene que tener un interés de Fórmula 1 por el país y del país por la categoría”.

Ahora es tiempo de bajar un cambio y todos los veranos elige venir a la ciudad para conectar con las raíces: “para mí es sagrado diciembre y enero en Mar del Plata, extraño mucho cuando estoy allá. Más aún que el verano pasado no había podido venir”.