Matías De Andrade: “Todavía creo que es una broma”

El nadador paralímpico se confesó sorprendido por la decisión de sacarlos del DNU que se firmó el pasado viernes: “no lo puedo creer, parece una broma del día de los inocentes”, dijo en Marca Deportiva Radio (FM 99.9).

Matías De Andrade posando con su Lobo de Oro.

Por Rodrigo Divito (@rodrigodivito)

Los deportistas olímpicos, de a poco vuelven a entrenar, pero el DNU presidencial generó mucha controversia porque dejó fuera a los clasificados para los Juegos Paralímpicos.

Uno de los representantes de la ciudad que tiene plaza confirmada, es el nadador Matías De Andrade que habló en Marca Deportiva Radio (FM 99.9): “la verdad que estamos ansiosos por volver, necesitamos el agua y no hay preparación física en la cuarentena que pueda sostener lo que nos da el agua”, dijo sobre el momento que están pasando.

Su cuarentena fue distinta a la del resto de los deportistas porque la atravesó en distintas fases: “me tocó viajar a Italia a uno de los primeros grandes torneos del año y nos enteramos en el camino que había una caso en Venecia donde íbamos nosotros. Cuando llegamos se decretó que no se podía hacer eventos masivos y al día siguiente ya estábamos regresando a Argentina”. Pasó la cuarentena en Mar del Plata y después tuvo otras sensaciones: “después de 14 días, nosotros volvimos a entrenar. Fuimos al torneo argentino de juniors y cadetes ya estaba todo complicado en Europa y cuando terminamos el torneo, el martes cerraron todo”.

A medida que fueron avanzando los días, empezó a tener contacto con otros deportistas paralímpicos que empezaban a tener problemas: “noté que muchos y la mayoría estuvieron muy afectados psicológicamente con lo que está pasando. Incluso personas con mucha experiencia en el deporte. Estuve una semana entrenando por Zoom y luego le pedí una semana de vacaciones a mi entrenador para reestructurarme mentalmente luego de la cancelación de Tokio”, dijo sobre su experiencia.

Pero fue tanto el tiempo de cuarentena que esperaban volver pronto a la acción y se encontraron con una noticia distinta: “el desgaste mental de mis compañeros se notó muchísimo. Después volvió a entrar el enojo cuando estaban los protocolos hechos, se sacó la expectativa y sólo se nombraba a los atletas olímpicos y no a los paralímpicos”.

La decisión le parece increíble: “creo que todavía es una broma del día de los inocentes, no lo puedo creer”, afirmó. Luego dijo: “se agarraron de decir que muchos atletas paralímpicos pueden ser de riesgo, pero hay pocos clasificados a Tokio a quienes se les puede hacer un seguimiento. Tienen nuestros datos y nos han hecho llenar planillas pidiéndonos muchos datos de quienes nos podía. Se apuraron por la presión que generaron en los medios los deportistas, se quiso calmar un ámbito y se terminó convulsionando otros”.

Incluso hay algunos que tendrían que estar entrenando ya porque tienen PreOlímpicos antes de la cita en Tokio: “prepararse para una clasificación es mucho más duro que prepararse para un Juego Olímpico. En estos 90 días, alguien se puede quedar fuera de un sueño, deben ser durísimos. Tengo una posibilidad de medalla que debo cuidar y recuperaré en el agua esta situación y me lleva 2 meses hacerlo por lo menos”.

La salida que ve en el corto plazo es que los gobiernos locales puedan permitir ese entrenamiento: “tengo la esperanza de que los municipios habiliten a sus deportistas de manera individual”, dijo finalmente.