“Será más difícil vivir sin el patín”
En el 2014, Melisa Bonnet le dijo adiós al patín carrera después de ser sub-campeona del mundo en Rosario. En Marca Deportiva Radio repasó su carrera y afirmó que “me voy conforme, más no pude dar”. También destacó que “voy a estar aferrada al deporte el resto de mi vida”.
Melisa Bonnet dejó el patín en el 2014.
Por Rodrigo Divito
@rodrigodivito
No iba a estar, pero decidió despedirse a lo grande, dentro de la pista…como se merecía. Melisa Bonnet dejó atrás una etapa importante para su vida personal y marcó a fuego la historia del patín carrera marplatense y nacional. Después del Mundial de Rosario, en este 2014, le dijo adiós a la Selección Nacional y al patinaje de alto rendimiento.
Después de 15 campeonatos mundiales consecutivos, decidió que era el momento de dejarle un lugar a los que vienen ascendiendo. La convencieron de que se despida en pista, disputando las pruebas por relevos en Rosario y pudiera recibir el calor del público argentino por última vez. En Marca Deportiva Radio, Bonnet hizo un balance de su carrera y habló sobre la difícil decisión para todo deportista: “es muy difícil, más para mí que hace 15 años que estoy en la Selección Argentina. No me resultó nada fácil”, admitió.
Su último año en la Selección fue intenso y lleno de emociones: “después del ODESUR no había continuado en el patín por temas personales. Me había decidido a dejar, pero a último momento la Confederación y el cuerpo técnico me propusieron ser parte de la Selección para formar los relevos. Era una buena oportunidad para despedirme con un Mundial en Argentina. Me vi tentada de estar”, dijo Melisa a quien la malla de la Selección le resultó una debilidad.
Melisa Bonnet hablando con Marca Deportiva años atrás.
A pesar de que no había ganado su derecho de integrar el equipo por el trabajo durante el año, no había demasiadas objeciones para la decisión del cuerpo técnico: “les agradezco que me lo hayan propuesto porque no cumplí en el año con todos los Nacionales y me propusieron estar”, indicó la campeona mundial juvenil.
Para completar un momento tan particular, Argentina tuvo un muy buen torneo: “quedé muy contenta con todo, el desempeño del Mundial y la actuación Argentina. Mejor no podría haber sido”, opinó quien supo representar durante muchos años al Club Atlético Mar del Plata.
CELESTE Y BLANCA
Que su último torneo haya sido con la Selección Argentina, no es un detalle menor, porque le dedicó mucho tiempo a formar parte del equipo y durante muchos años, a nivel individual fue la mejor representante nacional. Esta vez en Rosario, el torneo tuvo un significado muy particular: “todo para mí era disfrutar. De estar en el Mundial en mi país, de la gente con nosotros y lo bien que se organizó el Mundial. No hubo nada que decir de lo bien organizado que estuvo, de los 15 mundiales, este fue uno de los mejores organizados. A la vez me sentí con la responsabilidad de representar al país en casa y obtener resultados”, agregó. De todas maneras cumplió, porque cerró el torneo con una medalla de plata.
El trío del Atlético Mar del Plata, Natalia Artero, Melisa Bonnet y Silvina Posada.
Recuerdos habrá miles y anécdotas, millones; pero sin dudas para Melisa Bonnet el balance será positivo: “de la Selección me llevó muchas cosas. Pasé por diferentes grupos con distintos patinadores y me llevo de todo. Compañeros, amigos, gente para toda la vida, recuerdos maravillosos de mundiales, haber salido campeona del mundo juvenil y sub-campeona en mayores muchas veces. También cuando no me fue muy bien y sin embargo uno sigue y se esfuerza para ganar un poco más y mejorar los rendimientos. Eso te fortalece en todos los aspectos de la vida”, afirmó.
LA DECISIÓN
Melisa Bonnet decidió dar un paso al costado en uno de los momentos con mayor proyección para el patín carrera porque hay dos pistas homologadas (en Rosario y recientemente se terminó de homologar la de Mar del Plata) y mucho apoyo, algo que antes no tenían: “será mucho más difícil para mí seguir viviendo sin el patín, que vivir con el patín. Resulta muy difícil retirarse porque ahora tenemos todo. Está la pista homologada, mucho apoyo de la Confederación Argentina, de la Secretaría de Deportes y el ENARD; pero ya cumplí mi etapa y es el momento de pasar a lo que sigue”, sentenció segura de la determinación que tomó.
Melisa con su novio, Ezequiel Capellano, luciendo las medallas de Rosario.
Desde los 13 años en la Selección Nacional, pero ya desde muy chica ligada a la actividad, Bonnet siente que le ha dado mucho al patín y llega el momento de ocuparse de sí misma. “Hoy tiene que ver con un cansancio personal, no de la edad. Es algo personal porque siento la necesidad de ocuparme de otras cosas y no dedicarle tanto tiempo al entrenamiento. La única forma de estar a nivel mundial es entrenando 24 horas como lo hice durante 15 años, hoy me resulta imposible. Prefiero dejar ese lugar a chicos nuevos que tengan fuerza para entrenar y buscar más”, argumentó la representante en el último tiempo del Club Náutico.
Sabe que se cierra un capítulo, pero lejos está de alejarse definitivamente de la actividad deportiva. Seguramente en un futuro no muy lejano buscará un nuevo lugar donde desempeñarse y mantenerse siempre cerca: “me voy conforme, más no pude dar. Además de los resultados que para mí fueron por demás satisfactorios, me llevo todo del deporte y voy a estar aferrada al deporte el resto de mi vida”, finalizó.
Quedarán recuerdos, fotos, medallas; momentos inolvidables en lo más alto de un podio juvenil o con el inolvidable trío del Atlético Mar del Plata que integro con Natalia Artero y Silvina Posada. Pero hoy son parte del pasado. Melisa Bonnet dejó a la Selección Nacional, pero también dejó más viva que nunca su huella en un deporte con raíces bien marplatenses.