Oscar “Huevo” Sánchez: “Será una fiesta reencontrarnos”

El entrenador del equipo de Leyendas del Club Quilmes en el clásico que se disputará el 30 de septiembre habló a través de Marca Deportiva Radio (FM 99.9) sobre lo que significará esta posibilidad y además, sobre lo que vivió días atrás como invitado en el ingreso al Salón de la Fama de la NBA de Emanuel Ginóbili.

Oscar Sánchez habló en Marca Deportiva Radio (FM 99.9).

Por Rodrigo Divito (@rodrigodivito)

El próximo 30 de septiembre, Mar del Plata volverá a tener un clásico del básquet con el duelo que enfrentará a Quilmes y Peñarol, Peñaorl y Quilmes en la preparación para sus compromisos de la temporada, pero con el centenario de ambas instituciones como contexto ideal.

En la previa, habrá un duelo de dos cuartos de 10 minutos entre Leyendas de los dos clubes. Para el “cervecero” el entrenador será Oscar “Huevo” Sánchez secundado por Daniel Frola y Javier Bianchelli. Uno de los entrenadores históricos del club de Luro y Guido habló en Marca Deportiva Radio (FM 99.9) sobre esta posibilidad de revivir un partido tan importante: “ahora me estoy dando cuenta un poco lo que fue el club con mi paso con todos los chicos que fueron citados. Mi mujer me dijo que voy a tener que agarrar los libros de vuelta. Será una fiesta reencontrarnos con los chicos”, indicó.

Sin dudas, se moverán muchas fibras internas en los protagonistas de tantos clásicos a lo largo de la historia: “habrá mucha nostalgia porque fueron los mejores momentos del básquet marplatense. Estaba escuchando los que van a estar presentes con Pablo Gil, con De La Fuente y todos tienen una historia muy grande”.

Respecto de sus recuerdos vinculados al clásico, puntualizó en uno en particular, el primero: “me acuerdo que fue el que más me marcó porque yo en los años previos me iba al SuperDomo en mi auto y cuando la gente me veía en la platea me gritaba “gallina hijo de puta”, yo me hacía cada vez más chiquito en mi asiento. Juntaba esa bronca y esas ganas de ponerme a la par en la categoría. Cuando me reuno en el SuperDomo en ese primer clásico, los jugadores se reúnen alrededor mío y les dije, “vamos a jugar como cuando lo hacemos en el club por la coca, sin sistema de juego ni estrategia, cinco contra cinco”, me miraron todos y no entendían nada. Volcan Sánchez que dirigía Peñarol siempre tenía todos los sistemas establecidos y lo desconcertamos. Ganamos ese clásico. Siempre transpiraba mucho y ese dia transpiré hasta la corbata”.

Hace unos pocos días atrás, “Huevo” participó de un hecho extraordinario como el ingreso al Salón de la Fama de la NBA de Emanuel Ginóbili al que fue invitado: “cuando recibí el mensaje de Emanuel con la invitación era muy extenso y con los motivos por los que quería que esté en la ceremonia, me puso muy feliz. No dudé en ir y a medida que iba pasando el momento fui tomando dimensión. Cuando llegué al hotel me di cuenta que era enorme, un lujo impresionante, llegaba como invitado por San Antonio Spurs. Me empecé a dar cuenta de la importancia de Manu, yo no le enseñé a jugar al básquet, colaboré con todo lo que podía, le puse representante y lo volví loco hasta los 18 años que lo tuve. Estuve como 7 horas grabando notas con distintos medios y me iba dando cuenta”.

Dimensionar el impacto de Manu Ginóbili es difícil y Sánchez lo pudo vivenciar en primera persona: “cuando fuimos al museo del Salón de la Fama y vimos quienes pasaban en la pantalla, apareció Emanuel y no podía ser, una cosa inimaginable, cuando vamos a Springfield me agarró dolor de estómago porque la televisión me fue metiendo en la dimensión de lo que eso significaba”.