Alvarado tuvo una muy buena tarde para cerrar el año
El “Torito”, en un intenso partido, superó a Defensores Unidos por 4 a 2 en el Minella por la última fecha de la Zona A en la Primera Nacional. Los goles fueron de Albertengo, José Luis Fernández y Lucas Rebecchi por dos.
En la última fecha de la Zona A para la Primera Nacional, Alvarado tuvo una tarde ideal que empezó muy bien, se complicó en el complemento y pudo cerrarlo positivamente ante Defensores Unidos de Zárate por 4 a 2.
Si bien no había nada en juego, los dos equipos mostraron que iban a pelear por el partido y los tres puntos en juego. Pero la eficacia la tuvo el equipo de José María Martínez y rápidamente se pudo poner en ventaja. A los dos minutos, un centro de Ihitz fue a la cabeza de Albertengo que le ganó al arquero y puso el partido 1-0.
Esa ventaja temprana era fundamental para manejar el partido. Había espacios cuando recuperaba la pelota el equipo marplatense que además, tenía muy metidos en el partido al autor del primer gol, a Makarte por la izquierda y a Ramírez por derecha. En uno de los piques para tratar de llegar a un balón profundo, el goleador del equipo en la temporada, Sebastián Ramírez se esforzó y sintió un pinchazo en la zona posterior del muslo. Unos minutos después se quedó en el piso y debió abandonar el campo ante una ovación del público. Ingresó José Luis Fernández que se puso la cinta de capitán y 8 minutos después, aprovechó una buena jugada individual de Albertengo para definir exquisitamente en el área ante el cierre del arquero y un defensor, por encima del cuerpo de ambos. Un 2-0 que marcaba la diferencia entre equipos en el partido.
Siguió acumulando posibilidades con una increíble jugada de Albertengo que despejaron en la línea o un cabezazo cruzado de Ihitz que se fue apenas desviado además de otro del 9 que contuvo el arquero. Al final del primer tiempo la ventaja estaba bien porque la visita había apenas inquietado a Lungarzo pero mostrando que se podía asociar con peligro.
El segundo tiempo ya fue de un ritmo alto y de oportunidades constantes. Tuvo chances el “Torito” para aumentar y dos disparos en el travesaño el equipo de Zárate para descontar. Sin embargo, el siguiente gol llegaría a través de Lucas Rebecchi que luego de su ingreso quedó mano a mano con el arquero, lo esquivó y definió al arco vacío para sacarse toda la bronca y gritar su primer gol en Alvarado.
Parecía que el 3-0 era muy cómodo y no pasaría sobresaltos, pero en una ráfaga, todo se complicó. Primero descontó Despósito, pero parecía simplemente decorativo, pero tres minutos más tarde, Laumann puso el 3-2 que le ponía puntos suspensivos a la nublada tarde del Minella.
La reacción llegó rápidamente y nuevamente con soluciones de los jugadores que ingresaron desde el banco. Guido Vadalá le dejó una pelota de espaldas al propio Rebecchi que la acomodó y definió cruzado con mucha clase para el 4-2 definitivo que ya no correría peligro en el resto de la jornada.
Una fiesta desde temprano para Alvarado que quería cerrar el año con buenas sensaciones y así lo hizo. Cuatro goles, un partido más ganado y la sensación de que la temporada, podría haber terminado mucho mejor.
