Alvarado gana y crece

El equipo de Mauricio Giganti se impuso como local 1-0 ante All Boys por la Fecha 4 de la Primera Nacional y sumó tres puntos claves para sostenerse en la parte alta de la tabla. El gol fue anotado de cabeza por Tomás Rambert en el primer tiempo. El final fue caliente pero el equipo de Mar del Plata pudo aguantar los embates de la visita.

Todos abrazan a Rambert que metió el 1-0 (Foto: Gastón Ynsaurralde – Marca Deportiva)

Alvarado necesita hacerse fuerte de local para pelear arriba en el campeonato y, hasta ahora, viene cosechando puntaje ideal. Esta noche, en el Estadio “José María Minella”, superó por 1-0 a All Boys en el marco de la Fecha 4 de la Primera Nacional gracias al gol de Tomás Rambert en el primer tiempo.

Luego lo tuvo que aguantar y sostener desde la defensa y ahí fue donde se encontró con un buen partido de Juan Manuel Lungarzo y la línea defensiva que debieron trabajar hasta la última jugada del encuentro.

Desde el primer minuto, el local mostró que en la velocidad por banda tenía una buena herramienta pero tampoco demoró la visita en poner sobre la cancha sus herramientas: dinámica y buen pie para la circulación del balón. Alexis Melo tuvo el primer intento pleno al arco que tapó sin problemas Lungarzo.

Cuando podía y de tres cuartos de cancha en adelante, el “Torito” inquietaba con la movilidad de sus media punta, pero no podía tener un remate claro como para traducir ese peligro en situación de gol. El gol llegó a los 34 minutos y cuando el partido parecía que no tenía acciones claras. La fórmula fue una de las ya conocidas: Guillermo Sánchez desbordó por derecha y tiró el centro bien fuerte al segundo palo donde siempre está Tomás Rambert y otra vez con la cabeza, como hace dos semanas ante Brown de Puerto Madryn, le puso la cabeza al palo del que venía el envío para evitar la estirada de Mitre. Alvarado se ponía en ventaja en un momento muerto del partido y le anotaba el primer gol a All Boys en el campeonato.

La lógica del juego no cambió demasiado porque al conjunto de Floresta le costaba atacar con claridad y, cuando podía acelerar, el dueño de casa llevaba peligro principalmente por las bandas. En un desarrollo si demasiados matices, el local aprovechó la que tuvo y se fue al vestuario en ventaja.

Para el complemento, los dirigidos por Monasterio intentaron buscar el empate pero era peligroso dejarle espacios a Alvarado porque los puede aprovechar muy bien. Al igual que en el primer tiempo, All Boys merodeaba el arco sin generar situaciones claras y del otro lado, la batalla de un incansable Belinetz más la velocidad de los delanteros, también parecían una seria amenaza.

Entre ambos intentos, a los 25 hubo una jugada clara donde le cometieron penal a Guillermo Sánchez por un contacto en el pie cuando había anticipado luego de una serie de rebotes pero Nelson Sosa indicó que el delantero se tiró. El “Albo” se limitaba sólo a centros, sobre todo de la banda izquierda, pero sin precisión. Ahí lo encontró a Lungarzo siempre firme.

La más clara el visitante la tuvo con Toloza que, después de una buena jugada por derecha, no pudo empujarla al lado de la línea cuando ya no tenía marca pero había quedado un poco pasado. Tenía que aguantar Alvarado y las situaciones se acumulaban. Patroni tuvo un remate claro de frente al área y la pelota se fue apenas desviada.

Las útlimas dos fueron para el infarto. Primero por un cabezazo de Ferrari que sacó del ángulo Lungarzo y luego con un gol que no fue convalidado por posición adelantada donde se terminó desatando una fuerte discusión que se extendió luego de que Sosa pitara el final del partido. Lo aguantó cuando debía y convirtió cuando tuvo la oportunidad. Alvarado volvió a ganar en casa y sigue pensando en pelear arriba.