Horacio Zeballos ganó en Italia y alcanzó a Vilas: “Ganar Roma es increíble”
El marplatense dialogó con Marca Deportiva en conferencia de prensa y expresó sus sensaciones luego de alcanzar su 16° título ATP en la especialidad de dobles.
Por Lucila Morinigo (@lucilamgo)
Casi como premonitorio, Horacio Zeballos le había anticipado a Marca Deportiva las buenas sensaciones con las que llegaría a su próximo compromiso deportivo en Italia, en compañía del español Marcel Granollers. Su título en tierra italiana no es una sorpresa, sino el fruto de la convicción y trabajo.
Fueron casi seis meses sin competencias oficiales y tras rápidas despedidas en los únicos dos torneos disputados en el cemento estadounidense, se venía el cambio de superficie de cara a Roland Garros a finales de septiembre. Claro, luego de reencontrarse como equipo con Granollers y sumar partidos en el ATP 250 de Kitzbühel en Austria, el marplatense renovó energías en una superficie “natural” como lo es el polvo de ladrillo para los sudamericanos que crecieron jugando en ese tipo de canchas.
El Masters 1000 de Roma tiene una historia impresionante en los libros de tenis argentinos: en individuales la reina indiscutida fue Gabriela Sabatini con cuatro títulos (1988, 1989, 1991, 1992); Guillermo Vilas (1980), Jose Luis Clerc (1981) y Alberto Mancini (1989) supieron gritar “campeón” y también ocupar el lugar de finalistas a la par de Martín Jaite (1987), Guillermo Pérez Roldán (1988), David Nalbandián (2004) y Guillermo Coria (2005).
A toda esa élite se unió en esta jornada el zurdo surgido en el Edison Lawn Tennis de nuestra ciudad y a su vez, se dio el gusto de equiparar al histórico Vilas en sus dieciséis títulos a nivel ATP en la especialidad de dobles: “Sin dudas, alcanzar a Vilas es muy lindo. Es el mejor tenista de la historia argentina. Estoy súper contento. Para cualquier argentino que creció viendo tenis en ladrillo ganar en Roma es increíble, es un torneo muy especial. Crecimos viendo finales de argentinos (…) me miré mil veces la final entre Coria (Guillermo) y Rafa (Nadal) y es una locura. Hay mucha historia”.
La sociedad exitosa que construyó con Marcel Granollers le permitió, en 2019, alcanzar por primera vez el podio mundial y colocarse en el N°3, lugar al que regresará después de estas dos increíbles semanas de competencia entre Austria y Roma.
Al dejar atrás el US Open, la gran meta fue prepararse para Roland Garros y el calendario presentaba Kitzbühel, Roma, Hamburgo y finalmente la gran cita. Después de semejantes resultados, el próximo objetivo se trata más de recuperarse físicamente y presentar la mejor versión de ambos en Francia: “La idea original era jugar Hamburgo y Roland Garros, pero después de estas dos semanas nos vamos a sentar a ver. Me duele un poco la espalda y bastante el brazo. Puede ser una opción saltear Hamburgo para llegar mejor a Roland Garros”, sintetizó el marplatense en conferencia de prensa.
Así como en el cuadro de dobles él terminó triunfante, su felicidad también estuvo presente por Diego Schwartzman, compatriota que alcanzó por primera vez en su carrera la final de un torneo categoría Masters 1000. “El Peque” en la semifinal batalló en un increíble partido contra Rafael Nadal y también logró vencer al canadiense Denis Shapovalov para concretar ese pasaje a la definición: “Estoy super orgulloso, se lo merece. Eran las once y media de la noche y me llamó mi mujer para contarme. Al Peque lo conozco desde que tenía 15 años, compartimos entrenador, y sé que trabajó mucho para esto”.
Desde este 21 de septiembre arranca la etapa de preclasificación a los cuadros principales del Abierto de Francia y un descanso físico y mental previo al Grand Slam no vendría nada mal para el marplatense que evalúa paso a paso sus movimientos y sueña con una clasificación al Torneo de Maestros a final de la temporada, en el cual se reúnen los ocho mejores (duplas en dobles) del calendario tenístico.